domingo, 5 de febrero de 2012

San Juan de Puerto Rico (1 al 3 Feb)

Regreso a Puerto Rico despues de varios años. Es increible las cosas que han pasado, cosas buenas y cosas malas. A medida que me acerco a la isla mil sensaciones me invaden se que esta vez es una visita express pero no se como explicarlo es una sensación de llegar al hogar. En cierta forma Puerto Rico es mi hogar adoptivo y me siento orgulloso de poder llamarme boricua

Old San Juan

El Viejo San Juan es uno de los barrios más antiguos de San Juan, construído entre los siglos XVI y XVII, donde destacan los adoquines y construcciones de la época. Son varias las atracciones que alberga, como: la Fortaleza, el Fuerte San Felipe del Morro, el Fuerte San Cristóbal, o la Catedral de San Juan. Hay un servicio de "trolley" que hace un recorrido por las calles y monumentos principales. El Viejo San Juan fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1983.



Uno de los muchos encantos de Puerto Rico y de San Juan es el contraste en los edificios coloridos de estilo colonial. Sus calles adoquinadas, ese ritmo calido recibiminto que te brindan los lugareños hace una combinacion embriagadora







San Felipe del Morro

El Castillo de San Felipe del Morro fue reconocido por la UNESCO en 1983 como Patrimonio Mundial y es uno de los lugares más visitados de Puerto Rico, tanto por turistas como por locales. Se construyó para defende el Viejo San Juan y hoy podemos visitar las celdas, cocina, ver todavía algunos de los cañones de la época y recorrer sus salas, donde proyectan videos de la historia completa del castillo. Además se ofrece infromació sobre cómo se construyeron las murallas y hay una exposición fotográfica que recoge los momentos más significativos de la ciudad de San Juan. También se pueden ver la habitaciones de generales y soldados, y algunos uniformes y vestimenta de la época, así como utensilios de batalla, entre ellos espadas, rifles y pistolas.




Uno de mis lugares predilectos el Morro. Puedo pasarme horas mirando al horizonte y dejarme llevar por los siglos pasados en tiempos de piratas, ese pensamiento hace que esboce una sonrisa en mi rostro. Ya que de pequeño queria ser pirata esos de la botella del ron, del loro que no deja de repetir la misma coletilla, y como no ir en busca de tesoros.












San Cristobal

El Castillo de San Cristóbal es el segundo castillo defensivo de San Juan, aunque el primero en extensión. El primero es el de San Felipe, para defenderse de los ataques por mar. El de San Cristóbal es para los ataques por tierra. Se inició la construcción en 1634 y en 1785 fue terminado. En 1983 fue declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO y desde 1949 es administrado por el Servicio Nacional de Parques. Hoy en día es una de las visitas turísticas obligadas en San Juan. Normalmente, se visita conjuntamente con el Castillo de San Felipe con una entrada única más reducida. Todavía se puede admirar las construcciones que se realizaron, el objetivo de cada una de ellas y su historia, entre las que destacan la conocida Garita del Diablo, la plzada de armas, las cisternas y los tuneles.










Monumento San Juan

La Fontana de Las Raíces, es una fuente de mármol situada en el extremo oeste del Paseo de la Princesa. Desde ella se tiene una vista sin obstáculos de la bahía de San Juan. La fuente consiste en una serie de esculturas humanas y de animales, destacándose una figura femenina.








Museo Don Q

Museo dedicado a la elaboración del ron puertorriqueño Don Q, de la destilería Serralles Inc. Está ubicado en el Viejo San Juan y en él se pueden ver los diferentes tipos de ron y cómo se añejan. También se explica la historia del nombre Don Q, que viene de Don Quijote. La entrada es libre. Al final de la visita, se realiza una degustación gratuita de los rones. Cuenta con una tienda donde se pueden comprar distintos rones y material relacionado con Don Q, como camisetas, carteras...








Museo Casa Blanca

El edificio del museo Casa Blanca fue la casa del primer gobernador de Puerto Rico, Juan Ponce de León y por siglos ha pertencido a esa familia. Ubicada en el Viejo San Juan y de estilo colonial, en el museo se conservan muebles y varios objetos de los siglos XVII y XVIII. También se pueden visitar los distintos patios y recorrer los extensos jardines de la mansión. La entrada es gratutia.






Calle Cristo

Calle Cristo es una de las calles principales de la ciudad de Puerto Rico, siendo uno de los paseos más importantes de la zona vieja. Ofrece unas vistas espectaculares, sobre todo en su cruce con la calle de San Sebastián y en ella se localizan varios monumentos importantes como la Iglesia de San José, y el Cristo de la Capilla. A destacar también su oferta en restaurantes y tiendas.










Cuenta la leyenda que la Capilla del Cristo se erigió para honrar un milagro.

Dice la leyenda, que para los años 1750 más o menos, se había efectuado una carrera de caballos a lo largo de la calle Del Cristo. Uno de los participantes no pudo detener su caballo y se cayó por el precipicio. Don Tomas Mateo Prats, que era el secretario de gobierno para aquel entonces, invocó al Santo Cristo de la Salud y que el joven que cayó por el precipicio se salvó. Por agradecimiento al Santo Cristo de la Salud, Don Tomas Mateo Prats ordenó construir la Capilla.

La verdad, no es esa. Estudios recientes hechos por Don Adolfo de Hostos confirman que el joven que cayó por el acantilado, si murió. Y que Don Tomas Mateo Prats ordenó erigir la Capilla para evitar tragedias futuras.


Paseo de la Princesa

El Paseo de la Princesa se encuentra en el extremo sur de San Juan de Puerto Rico. En él se encuentra la oficina de turismo de la ciudad, en un edificio que fue una prisión española. El paseo llega hasta la bahía, y en él suelen celebrarse exposiciones al aire libre y otros eventos. En el extremo oeste del paseo está la Fontana de Las Raíces.











Plaza Hostos

La Plaza de Hostos se encuentra al oeste de San Juan de Puerto Rico, y está vinculado directamente al puerto. En ella se pueden encontrar palmeras que dan sombra y bancos para sentarse. Además hay una fuente, y un monumento dedicado a los emigrantes. Frente a la plaza se puede ver un edificio blanco con dos torres del Banco Popular.







Paseo del Morro

El Paseo del Morro comienza con las paredes de arenisca del Morro del Fuerte,y va a lo largo del Atlántico. Anteriormente se desempeñó como una ruta de abastecimiento para la parte occidental de San Juan. En 1998, esta calle se transformó en un camino pavimentado. El paseo está concebido con vistas al océano Atlántico, a la amurallada Ciudad Vieja y el Morro del Fuerte
.










Hay una leyenda que siempre me ha fascinado y siempre que visito el Morro la recuerda y la leyenda no es otra que la garita del diablo

Con un grito de" Alerta" el centinela comenzaba la jornada militar, Esto se efectuaba frecuentemente para no dormirse y atestiguar su vigilancia. Misteriosamente, durante una noche oscura, desapareció un centinela de esta garita, surgiendo así la leyenda de la "Garita del Diablo".

Los habitantes de la isla de Puerto Rico, eran muy propensos a los ataques de piratas. Por tal razón tenían que pasarse la vida vigilando. La ciudad capital estaba rodeada (aún está) por castillos y murallas . Alrededor de las murallas habían, entre trecho y trecho, unas garitas o torresitas donde los soldados hacían su guardia día y noche. Por las noches se sentías las rondas de gritos que los centinelas gritaban para no dormirse.

- ¡Centinela alerta! - le gritaba uno
Y el más cercano respondía:
-¡Alerta está!

Entre todas las garitas, había una, la más distante y solitaria. Estaba sobre un acantilado profundo en el extremo de la bahía. En el silencio de la noche, el ruido del mar producía un rumor como si los malos espíritus estuvieran cuchicheando.

Había un soldado al cual llamaban "Flor de Azahar". El azahar era una flor muy blanca y como el soldado Sánchez tenía la piel blanca como el azahar, le llamaban así. Esa noche le tocó a Sánchez velar en esa garita.

Como de costumbre, los gritos de contraseña de los soldados se escuchaban de trecho en trecho. Pero, al llegar al de el soldado Sánchez, nadie contestaba. Solo se escuchaba el viento silbar y el mar con su rumor.

El miedo se apodera de sus compañeros que pasaron la noche temblando, del solo pensar, que le hubiese pasado a su compañero.

Al salir el sol, todos salieron corriendo hacia la garita a ver que había pasado en la garita, que se había quedado muda durante la noche. Encontraron: el fusil, la cartuchera y el uniforme del soldado Sánchez. El soldado Sánchez, había desaparecido sin dejar rastros.

Los soldados, que eran supersticiosos, comenzaron a decir que un demonio lo había sorprendido y se lo había llevado por los aires.

Desde ese día, a la garita del desaparecido Sánchez, se le conoce como "La Garita del Diablo".

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